Yo... que subo a pie por esta dura pendiente, Que no recuerdo donde está Dios presente, Que de palabras he llenado el silencio, Buscando el sentido de un abandono. Yo... que tomo el tren sintiendo su traqueteo, Para pensar en un futuro que espero, Aunque este viaje me ha ofrecido otras manos Y tú te has quedado. Cuánto pesa en mí esta ausencia... esta falsa indiferencia, Desmonta mis hábiles... frágiles... gestos de apariencia, Ciertas veces la distancia... hasta puede ser violenta, Pasa mis límites... físicos... y no me da esperanza. Y estoy aquí... en ti, Y estoy aquí... por ti, Me quedo aquí... así Porque tú estás... aquí. Yo... girando en un adiós inútil, vacío, Como una iglesia excomulgada que ya No da respuestas, que blasfema entre dientes En noches que pierdes... te quiero, porque... Yo... bajo del tren en este viaje no mío, Y los chirridos son como un desafío, A esta estación puedes llamarla "perdona" Tú puedes ahora. Lento estrecharé tus manos... son gaviotas que volando Muy lejos escaparían... de una idea... ya no habrá prisiones, Si te inclinas en mi cuerpo... que se agita, inquieto y tenso, Jadeas y dices sí... ya estarás... donde yo pretendo. Y estoy aquí... en ti, Y estoy aquí... por ti, Me quedo aquí... así Porque tú estás... aquí... Y estoy aquí... Y estoy aquí... oh... por tí. Corre el día como un telegrama... ves Pasar las horas como una condena... crees Y todas tus protestas... ahogaré... con esta boca. El pasado no me miente... es un robo a mi presente, Por eso relájate... abrázame... abre bien la mente. Y estoy aquí... en ti, Y estoy aquí... por ti, Me quedo aquí... así Porque tú estás... aquí. Y estoy aquí... Y estoy aquí... Me quedo aquí... Porque tú estás... aquí. Y estoy aquí.